Casi nadie quiere comprar un vehículo eléctrico (VE) y la industria automotriz está sintiendo la presión a medida que las ganancias se desploman.
Mercedes perdió una tonelada de efectivo, alrededor del 21 % de su flujo de ganancias, tras la introducción de una nueva flota de vehículos eléctricos que esperaba que atrajera a los consumidores. Resulta que la gente está harta de intentar que los Vehículos Eléctricos satisfagan sus necesidades de la misma manera que los vehículos a gasolina y diésel, por no hablar de los altos costos que implica «volverse ecológico».
Porsche tampoco está alcanzando sus objetivos de Ventas. Al igual que Ford, que, según se informa, pierde unos 50.000 dólares por cada Vehículo Eléctrico que vende. Incluso Tesla está tambaleándose, ya que sus beneficios están en «caída libre» del 45 %.
(Relacionado: ¿Sabías que Elon Musk quiere controlar «cada faceta» de la vida humana con un sistema de inteligencia artificial [IA] Skynet real, que está desarrollando actualmente?)
Los Fabricantes de baterías para Vehículos Eléctricos también están perdiendo beneficios a medida que los Fabricantes de coches abandonan sus líneas de Vehículos Eléctricos. La Empresa alemana de baterías Varta, por ejemplo, sufrió una caída de más del 70 % en el precio de sus acciones el mes pasado, en medio de Informes de quiebra.
Según se informa, el Grupo Químico belga Umicor también sufrió un golpe de 1.500 millones de dólares debido a la disminución de la demanda de Vehículos Eléctricos. Lo que llevó a la Empresa a posponer los planes para construir una Planta de reciclaje de baterías.
La Industria de los Vehículos Eléctricos, “al borde del colapso”. Otro Plan Psicópata que se va al garete Vehículos Eléctricos
Matthew Lynn, del periódico The Telegraph (Reino Unido), escribió que todos estos últimos acontecimientos apuntan a un Colapso Inminente de la Industria de los Vehículos Eléctricos. A pesar de los cientos de miles de millones de dólares en inversiones, la verdad es que los Vehículos Eléctricos son un fracaso.
«Los líderes políticos y los adictos a los subsidios que los rodean han inyectado cientos de miles de millones de euros, dólares y libras en esta Industria. Seguramente, ya es hora de que rindan cuentas por las enormes cantidades de dinero de los Contribuyentes que se han desperdiciado», escribe Lynn.
Se mire como se mire, los Vehículos Eléctricos no tienen sentido financiero, ni económico. La Industria está fuertemente subsidiada, porque tiene que ser así. De lo contrario, colapsaría. De hecho, sin subsidios financiados por los Contribuyentes, la Industria de los Vehículos Eléctricos ni siquiera existiría.
«En realidad, el balance de los Vehículos Eléctricos parece estar inundado de números rojos», explica Lynn. «No es difícil entender por qué. «Los costes son demasiado altos, como han descubierto Empresas como Ford. Ya que los coches eléctricos son mucho más caros de producir que sus rivales tradicionales de gasolina. Y la escasez de materiales críticos hace que los precios suban cada vez más».
«Hay demasiada capacidad en la Industria, las Empresas invierten demasiado en demasiadas Fábricas y Centros de Distribución. La demanda del producto final ha comenzado a desmoronarse. Los consumidores están cada vez más nerviosos, por lo que puede convertirse en tecnología obsoleta. Los costes de Seguros y Mantenimiento están resultando mucho más altos de lo esperado para muchos, una vez que los vehículos están realmente en la carretera».
Otro factor que influye en la ecuación es el auge de los Vehículos Eléctricos chinos de bajo coste y muy mala calidad. De forma muy similar a cómo Temu y Amazon funcionan para rebajar los precios de los productos nacionales, el mercado chino de vehículos eléctricos está acabando con otros mercados de vehículos eléctricos. Especialmente los de gama alta, como Mercedes y Porsche.
Los responsables políticos tienen mucho que explicar después de haber prometido éxito y prosperidad con la transición a los Vehículos Eléctricos. Ha ocurrido lo contrario y, una vez que los Consumidores se den cuenta de lo que ha sucedido, podrían rodar cabezas.
El régimen de Biden canalizó casi 2.000 millones de dólares de fondos de los Contribuyentes a la Industria de los Vehículos Eléctricos. Gran parte de los cuales fueron a parar al multimillonario Musk. Esto se suma a las decenas de miles de millones de dólares en subsidios que se ofrecen a los Clientes en el momento de la compra.
«[El régimen de Biden] ha ofrecido decenas de miles de millones en subsidios, de más de 7.000 dólares por vehículo vendido. E incluso más para construir la infraestructura,. Incluido un plan de 7.500 millones de dólares para instalar cargadores, que terminó con solo siete realmente construidos. «Lo que equivale a más de 1.000 millones de dólares cada uno, para lo que básicamente es solo un enchufe», dice Lynn.
Puede encontrar más noticias relacionadas con la debacle de los Vehículos Eléctricos en RoboCars.news .
Las fuentes de este artículo incluyen:
Telegraph.co.uk
NaturalNews.com
.
Comentario de esta Casa. Otro Plan Psicópata que se va al garete Vehículos Eléctricos
.
Nos moríamos de ganas de leer esto. Un fantasma maléfico, un halo de muerte, una mano siniestra se ha venido cerniendo sobre todos los Planes de los mayores Criminales de la Historia de la Humanidad. Y han cometido los mayores crímenes. Porque hasta ahora los criminales actuaban en solitario, con pequeños clanes de cómplices locales, a escala individual. El «capo» era un solo individuo. Que organizaba, con sus medios económicos, un entorno de secuaces que obedecian sus órdenes.
La novedad ha sido, en esta ocasión, que se han unido algo así como entre docenas y un centenar de «capos». Todos ellos con la misma idea en sus cerebros: Deshacerse de todos los que no son como ellos. Los que no son tan ricos, tan alocados, tan orgullosos, tan creídos de su clase, de sus privilegios, de su destino de triunfar en todo lo que acometan.
Y han podido recolectar a toda la hez de la sociedad. Con cultura y sin ella. A todos los ambiciosos, a los sin escrúpulos, a los arrivistas, a los despiadados, a los depravados, a los amigos de lo ajeno, a los que quieren vivir bien sin trabajar. Y con esa recua inmensa de seres abyectos, han querido formar un inmenso Equipo. Con el objetivo vano de crear un Nuevo Mundo.
Eliminarían a todos los – según ellos – «fracasados». A las buenas personas, a los trabajadores, a los padres y madres que se sacrificaron por sus hijos, a los trabajadores de base, a las clases medias de todo el mundo, que han podido subir de lo más bajo, para izarse a un nivel digno, con su trabajo diario. Todos ellos son los «fracasados». Porque no han alcanzado la riqueza y poder que tienen Ellos, gracias a su familia de antepasados. Realmente, Ellos no han conseguido nada. No han creado nada. No han hecho nada. Solamente, elegir una buena cuna.
Y actúan, en su loco caminar por un planeta que no comprenden, que desprecian, que odian. Forjando planes ridículos para cualquiera que haya vivido, y abierto los ojos mientras vivía. Porque Ellos no los abrieron. Los mantuvieron fijos en su entorno inmediato. Un entorno de seres que les contagiaron su alejamiento de la sociedad, sus antecesores. Y un entorno de servidores, que todo lo veían del mismo color que su superior. Al que no se podía negar nada. A quien sólo se podía asentir.
El resultado de todo ello ha sido – de manera unánime – dar a luz unos seres deformes, sin criterio, sin cerebro pensante, que han vivido siempre entre el halago y la sumisión. Convencidos de que sus ideas eran todas geniales, divinas, acertadas siempre, por completo. Seres egoístas, inconscientes de su propia deformidad, de su inmensa debilidad, de su absoluta nulidad para acometer proyecto alguno.
Y estos seres, inútiles hasta el milagro, se han propuesto nada menos que cambiar el mundo. Eliminar el fruto de todas las civilizaciones que han discurrido sobre el planeta en los últimos 5.000 años. Y, en su lugar, implantar el fruto de sus deseos, de sus sueños, una sociedad que los tuviera a Ellos en la cúspide. Adulados, servidos y mantenidos por una recua inmensa de servidores, criados y esclavos. Con algunos mandos intermedios, para que sirvieran de nexo de unión, lejana, entre los Amos y los esclavos.
Eso explica que sus deseos y planes fueran sólo eso, fantasías, sueños vanos de unos niños consentidos, de edades comprendidas entre los 5 y los 10 años. Manejando cantidades asombrosas de dinero y poder, heredados de sus ancestros. Pero sin «substancia gris» en sus pequeñas mentes infantiles sin desarrollar. Que no comprenden cómo son ellos por dentro, que no saben que haya siquiera un interior que, en otros casos – no en el suyo – piensa , discurre y elabora juicios. Ellos viven ajenos a todo lo que no sean sus sueños,. Y confurnden sus sueños con la realidad. Porque sus medios les permiten rodearse de seres sin valor, que les siguen la corriente, fingiendo creer en lo que Ellos afirman con aplomo infantil.
Eso explica el fallo de su Plan Inicial, el de las «inyecciones eficaces y seguras». El de las «Ciudades de cuarto de hora». O el de los «Vehículos Eléctricos». El de la carne artificial. O la inmigración forzada. Y todos los que vengan, en el poco tiempo que las queda ya. Que para que fracase el Nuevo Orden a implantar por parte de los inútiles totales, baste reaccionar. A los afectados por los mayúsculos desatinos que les quedan por llevar a cabo a los cómplices del último nivel. Que son los políticos. Para conseguir rebajar la calidad de vida de los occidentales, recorte a recorte, desmán tras desmán.
Pero son demasiados ultrajes los necesarios para haceros volver a la Edad Media. Y ni ellos durarán tanto. Al Lejano Oriente, al país que casi limita con el del Sol Naciente, le hicieron falta 27 años de Guerra durísima, con el salvajismo que sólo cabía en la Edad Media, para anular la voluntad de todo un pueblo. Y someterlo. para que se conforme sólo con vivir. Como sea, pero vivir.
Ellos no van a tener 27 años para sus desmanes.
Otro Plan Psicópata que se va al garete Vehículos Eléctricos