Película de los cuatro años últimos
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Editorial
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Conforme pasan los años de Guerra se va viendo con más claridad el cariz que va tomando. Las hostilidades empezaron en Marzo de 2.020. Fue el año de los encierros, todo el mundo hablaba del «bicho» y se nos decía que estaban preparando una vacuna para inmunizarnos. Los encierron incidieron en la Economía, negativamente. A finales de Diciembre de 2.020 se aprueban las vacunas contra el «bicho» «para uso de emergencia» en países sucesivos.
«Hasta Diciembre de 2.020, los países habían comprado por adelantado más de 10 mil millones de dosis de vacunas. De ellas, aproximadamente, la mitad habían sido adquiridas por países de ingresos altos, que representaban el 14% de la población mundial.» (Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Vacuna_contra_la_COVID-19).
Son paises de ingresos altos: Estados Unidos, Canadá, Europa. Australia, Nueva Zelanda, Chile, Uruguay, Arabia Saudita, Rusia, Argentina y Venezuela. Son sólo el 14% población mundial.
«Para el 6 de Enero de 2.022, se habían administrado 9.370 millones de dosis de las vacunas contra la COVID-19, distribuidas entre el 59% de la población mundial.» (Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Vacuna_contra_la_COVID-19 ). Esto es, a 4.700 personas. Frente al 93´3% pretendido. Es decir, 2/3 del objetivo planeado.
Lo que significa que 2.021 fue el año de vacunación generalizada en el planeta. En el otoño de 2.021 el Padre Klaws deja caer que tal vez se dé un hackeo mundial que interrumpa la cadena de suministros. El 4 de Febrero de 2.022, oportunamente, en Pekín dan comienzo los Juegos de Invierno. Y no hay apagón mundial. Cosa imposible, si se pretendía mantener los Juegos de Invierno chinos.
El 24 de Febrero de 2.022 Ucrania, que lleva desde 2.014 bombardeando las provincias pro-rusas del Este de Ucrania, inicia una invasión limitada a tales provincias. A la epidemia por el «bicho» se añade ahora la Guerra de Ucrania, en pleno centro de Europa. Algo difícil de entender, si no se está al tanto de la situación en Ucrania desde 2.014. Conociendo los antecedentes mundiales desde 1.991, año de la caída de la URSS, las cosas se entienden mucho mejor.
Para terminar de empeorar las cosas, el 26 de Septiembre de 2.022 una atentado hace explotar tres de los cuatro canales de los Gaseoductos Nord Stream, que llevaban el Gas Ruso a Europa, desde Rusia hasta Alemania. Alemania, principal país perjudicado, no mueve un dedo, ni protesta. Las informaciones – según un antiguo Premio Pulitzer – apuntan a unas maniobras de la OTAN en la zona, unos pocos meses antes.
Todas estas novedades preocupantes hacen que la Economia del mundo se lance por una acusada pendiente de descenso. Los años 2.022 y 2.023 no son en absoluto años boyantes para la Economía mundial. Todo lo contrario. Dimos cuenta de ello en el artículo anterior, «El año en que todo empezó a desmoronarse.«
A la situación referida hay que añadir la entrada en escena de los países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y SudÁfrica). Nacen como una reacción al papel preponderante y prepotente del líder de Occidente tras la caída de la URSS en 1.991. Su política de avivar guerras en paises del Tercer Mundo donde haya suficientes alicientes en el subsuelo – y con la excusa de la escasa democracia en los mismos – le ha enajenado la animadversión y el hartazgo de más de medio mundo. A primeros de este año 2.024 se añadieron Egipto, Irán, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita y Etiopía. Lo que se muestra en el mapa que sigue.
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Podría decirse que el objetivo de este nuevo Bloque es terminar con el monopolio de los Estados Unidos en el mundo. Por la vía del comercio y la política consensuada, según indican los BRICS. Una de las primera medidas que han puesto en práctica es realizar sus intercambios comerciales en la moneda de los países exportadores, no en dólares, como hacían hasta ahora. Sólo esta medida ha supuesto un fuerte golpe para la supremacía del país lider hasta ahora.
Y – no menos importante para nosotros, las víctimas occidentales – se van a negar a seguir el «Nuevo Orden Mundial», favorecido por los de siempre. Y previsiblemente, no harán las tonterías de inyectarse, aceptar pasaportes de vacunación, recogerse en sus casas, etc. cuando los de siempre decidan convocar una nueva falsa pandemia. De forma que el Orden Mundial a implantar en todo el planeta tal vez tenga qe conformarse con serlo en un escenario de un poco más del 14% de la población mundial. Lo que significa su quiebra total. Por eso están preocupados, inquietos, nerviosos, diarréicos, paranoicos. Aunque disimulan, para que sus cómplices no abandonen la ya frágil barquilla.
De manera que con estos datos puede entenderse con más claridad aún la lúcida exposición de nuestro invitado de hoy. Con la que no coincidimos en pequeñas explicaciones puntuales que da. Pero que, en su conjunto, creemos interesante que el Lector esté enterado.
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El vídeo original, a continuación.
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