Habla un Médico sin conflictos de intereses
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Con mi agradecimiento a Delcampo
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Comentario de esta Casa.
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Volviendo a los problemas del día a día, no las tenemos todas seguras con el mortal Tratado que la OMS propone poner en marcha, con su mayor desfachatez, contra toda la Población del Mundo. Sólo sabiendo que tienen a casi todos los Gobiernos comprados, pueden atreverse a hacerlo. Y creer que lo va a lograr. Claro que no van a decirnos los problemas que se les presentan.
«Todo marcha a las mil maravillas», dicen siempre los que engañan. «Todo va viento en popa. Tranquilos, que ya los tenemos en el bote. Es sólo cuestión de unos pocos días más.»
Y los cómplices contienen el aliento. Porque saben que ellos también tienen sus vidas en juego. Se metieron en un juego peligroso. Claro que el panorama que les presentaron los de muy arriba era una de esas Ofertas que uno no puede rechazar. Lo iban a perder todo, si rechazaban la ocasión única de su vida. No habrá otra.
Llevaban planeándolo 70 años. Antes de ellos nacer, ya se estaba trabajando en el Plan. Un Plan genial, que no puede fallar. Las mayores fortunas del mundo colaboran en el Plan. De ellos dependía estar dentro del barco o quedarse fuera. Y seguir el destino de los parias, del ganado, de la plaga. Ser aplastados. Exterminados. No había términos medios. No se podía ser neutral. O se estaba con Ellos, o se quedaban fuera para siempre. Sin vuelta atrás.
Ellos sólo tenían que decidir. Eran del 5% a los que se les proponía un trato. Al 95% restante ni se le hablaría del Plan. Morirían – ellos y sus familias – sin saber por qué morían. En cambio, ellos y los suyos podían salvarse. Y vivir como los Elegidos. Dependía de ellos …
Y como tenían poco bagaje moral. Como carecían de empatía hacia nadie que no fueran ellos. Porque sólo buscaba medrar en la vida, a costa de lo que fuera. Como no tenian ningún sentido del deber. No se sentían solidarios con nada, ni con nadie. Como no habían madurado desde los tiempos del Paleolítico, cuando vivían en las cavernas … Apenas les costó esfuerzo alguno sumarse al complot criminal.
«Ya verás. Te va a cambiar la vida desde el día de hoy. Hoy te has convertido en un Triunfador. Recuerda este día. Has tomado la mejor decisión de tu vida.» Y se fue a casa convencido de que había acertado. Tenia una familia nueva. Y esa familia la formaban todos los seres importantes del planeta. ¿Cómo iban a fallar todos Ellos, si eran todos los Triunfadores de alrededor del mundo?
Pero sólo han pasado cuatro años y las cosas se han puesto difíciles. No ha salido todo como esperaban. Como les dijeron. Han surgido dificultades y los Planes se han atrasado. No se pensó que iba a haber Resistencia. Y la hay. El Plan principal, la pandemia mundial, no ha dado todos los frutos que esperaban. Y habrá que repetir la jugada. «Pero esta vez ya lo han previsto todo.»
Claro que la reacción de la gente a lo mejor no es la misma. La vez anterior estaban desprevenidos. Ahora en cambio … Y ellos tendrán que repetir la misma actuación. Declarar el Estado de Emergencia. Con el de Alarma no sirve. Hay que ir un nivel más arriba. Para tener autoridad total. Ahora ya pueden mandar lo que quieran. Hablan de sacar el Ejército a la calle incluso, si es necesario. Pero seguramente no hará falta.
Ha habido dimisiones claras. Otras, camufladas. Y alguno ha empezado a dar señales de cierta rebelión, de ir un poco a su aire, a la contra. En temas de poca importancia, desde luego. Para, si las cosas se tuercen definitivamente, poder decir que él estaba en el bando correcto desde hacía tiempo. Y poder seguir en el mismo bando, si todo se endereza. Ya se verá … Vivir al día.
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