Ocultamiento y declaración de intenciones
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Miembros de la UME y de los bomberos trabajan en la búsqueda de víctimas mortales en el cauce del río Turia.
DANA | “Un evento de las características de Valencia se puede dar en Navarra”
Peio Oria, ex-Delegado de Aemet en la Comunidad Foral, dice que si se hubiera coordinado el aviso rojo, se hubieran evitado muchas muertes.
PAMPLONA | 09·11·24 Ocultamiento y declaración de intenciones
DANA | “Un evento de las características de Valencia se puede dar en Navarra” J.J. GUILLÉN / EFE
Peio Oria Iriarte, ahora Representante del Equipo de Reducción de Riesgo de Desastres de la Empresa navarra Tesicnor, y anterior Delegado en Navarra de la Aemet, ha estudiado a conciencia el episodio de la DANA ocurrido en Valencia. Licenciado en Física por la Universidad de Salamanca y Doctor en Ciencias por la Universidad Técnica de Darmstadt (Alemania). Antes de llegar a la Delegación de la Aemet, estuvo cuatro años al frente de la Oficina de Meteorología en el Aeropuerto de Pamplona-Noáin. Desde Mayo de este año trabaja en Tesicnor.
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Oria recuerda que “el episodio a nivel meteorológico de la DANA se ha salido bastante lo habitual. Primero, porque se trata de un episodio que ha sido muy persistente en el tiempo. El día 29, su núcleo se quedó bloqueado durante muchas horas, entre 15-20 horas. Eso no es habitual. Una DANA se suele desplazar. Eso hizo que toda la zona de máxima inestabilidad en cuanto a tormentas, y la parte delantera de la DANA, que es la que descarga lluvia torrencial, estuviera sobre la zona cero de Valencia”.
El Especialista considera que además se trata de un fenómeno “grande en cuanto a dimensión. Otras veces, este tipo de DANAs son más localizadas, pero esta vez ha afectado a varios territorios”. Para su conformación, ha afectado “la evaporación muy activa del Mar Mediterráneo debido a que se está elevando su temperatura hasta una cifra récord y, junto a ello, existen también vientos locales que han contribuido a que la masa de agua se quede más estancada en el interior de Valencia”. De esta forma, con todos esos ingredientes, se ha conformado un episodio con “un récord de precipitación en una hora con 184,6 litros por metro cuadrado. En el total diario la Estación Meteorológica de Turís Mas de Calabarra ha arrojado 771,8 litros. Para hacerse a la idea, todo lo que supere los 60 litros en una hora son precipitaciones de forma torrencial”.
A la vista de los últimos acontecimientos, grandes descargas de lluvia por ejemplo en Bera y Arano el año pasado, Oria considera que “en cualquier momento y es perfectamente posible que podamos tener un evento de esas características en Navarra. Ya ha habido episodios torrenciales en Bera, en la Zona Media en 2015, en Elizondo en 2014 y se replican en muchos sitios y en muchas frecuencias”.
Oria explica que en la Comunidad Foral no se produciría una DANA de un “régimen puramente mediterráneo”, porque “aquí se producen inundaciones por persistencia de precipitaciones en varios días, pero la realidad es que esos episodios torrenciales se han dado y se darán. Es un fenómeno global”.
En cuanto a la gestión de los avisos meteorológicos, Oria entiende que “si la alerta hubiera sido coordinada y hubiera alcanzado a todos los Municipios, podía haber habido tiempo para acciones preventivas, y se hubieran salvado muchas vidas. Es una inundación muy súbita. No es solo agua, sino que hay un arrastre de sedimentos, barro y vegetación. Es un flujo hiperconcentrado y eso no es fácil de predecir”, advierte.
Pero también recuerda que ante un aviso rojo como el que existía, “las Autoridades te van a pedir que no salgas de casa. Me ha sorprendido mucho la respuesta de Valencia. Básicamente, ante un nivel rojo meteorológico, sólo había que seguir el radar, que marcaba claramente las zonas y registros de lluvia. Así se puede hacer el seguimiento durante horas y horas. De esa forma se veía que iba a producir un gran impacto. Quizás no hasta el punto al que ha llegado. Pero sí que se veía que iba a tener gran impacto. Por eso me asombra que no se intentara por todos los medios de alejar a la gente de los cauces”.
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Comentario de esta Casa. Ocultamiento y declaración de intenciones
Hoy sólo tendremos ocasión de comentar las «perlas» que saturan este «artículo de opinión». Más adelante daremos las razones de nuestra disconformidad. No teníamos aquí opinión alguna sobre la Empresa que figura como antiguo trabajo de nuestro Doctor en Ciencias por Darmstadt. Desde lo sucedido recientemente – sabiendo que dicha Empresa, ofical y nacional, estuvo implicada desde un principio en dicho evento – nuestros recelos se han despertado. Pero el presente artículo los corrabora.
Hemos señalado las ideas sembradas por el anterior Delegado de la Empresa citada en rojo. Porque no tienen desperdicio. Si fueran una o dos, a lo largo del artículo, podrían pasar desapercibidas al lector no precavido. Pero aqui se trata de un ametrallamiento de ideas «interesadas». Debe ser que en la retaguardia hay una «parte interesada», usando el vocabulario del ya retirado Padre Schwab.
Lo primero que indica el articulista es que el ex-Delegado «ha estudiado a conciencia» la Dana de Valencia. Aquí también la hemos estudiado. A fondo. Nos va la vida en ello. Y provistos de similares cualificaciones académicas que las del Doctor en Ciencias de Darmstadt. Pero nuestros resultados no pueden ser más dispares, opuestos y contradictorios a los suyos. O Darmstadt o esta Casa estamos equivocados. Los dos es imposible que acertemos.
Hay unas pocas afirmacines de nuestro Doctor en Ciencias en las que coincidimos: Las obvias y neutras. Como que «la DANA se ha salido bastante (de) lo habitual«. Desde luego que sí. Tal vez sea la primera «gota fría» tan largamente elaborada y cuidada. Y la llamamos «gota fría» porque es como siempre se la llamó. Antes de que vinieran los nuevos «expertos» a cambiarnos las definiciones para despistar. Llamarle «Depresión Aislada en Niveles Altos» nos la aleja. Y nos impide imaginarla, en la distancia. Y en la comprensión.
Tal vez haya una intención oscurecedora en ese querer situarla muy lejos, muy alto. Como se genera – aseguran – en las capas altas de la atmósfera, escapa a nuestro control y acción. No podemos montar una escalera y subir a esas alturas. Lo que suceda en «Niveles Altos» compete más a la Divinidad que a la Humanidad. Somos inocentes del todo. Los humanos no tenemos nada que ver. ¿No es así, humano confiado?
Sigue afirmando – y nadie puede contradecirle – que fue un suceso «muy persistente en el tiempo«. Vamos, algo así como si los «Altos Vientos» le tuvieran manía a la huerta valenciana. Y quisieran cebarse en ella. Y reducirla a escombros. Como así hicieron.
El hombre, experto en el manejo de ese tipo de datos, nos indica: «El día 29, su núcleo se quedó bloqueado durante muchas horas, entre 15-20 horas. Eso no es habitual.» El día 29 era Martes. El Martes fatídico, en el que tantos hecho atípicos y no habituales se dieron en tierras valencianas. Para desgracia de sus habitantes. Pero eso tiene que dejarse para más adelante. Hoy nos centramos en comentar un artículo.
Sigue el Doctor en Ciencias, «Una DANA se suele desplazar.» Cosa que no nos extraña nada y que entendemos muy bien. Porque en las «Altas Capas de la Atmósfera», donde las DANAS andan como quieren, no hay obstáculos a su libre discurrir. Y sin embargo se ha quedado entre 15 y 20 horas parada sobre la zona cero de Valencia … Hum … ¿cómo es posible que no continuara el camino de donde venía, si no hay obstáculos en las «Altas Capas de la Atmósfera»?
Y nuestra mente se va a los huracanes Milton y Helen, que pasaron barriendo las dos Carolinas y Florida, en Estados Unidos, recientemente. Procedentes del lejano Golfo de México, como siempre suele pasar. Los huracanes y tornados en esa zona parecen ser endémicos. Lo que varía es su intensidad, o fuerza. Pero haberlos, haylos. Cada año. ¡Qué mala suerte la de los habitantes de Florida …!
Nuestro hombre entra ya en profundidades: El origen del fenómeno. Que no es sino “la evaporación muy activa del Mar Mediterráneo.» Así que la causa es fortuita. El Mediterráneo está más caliente de lo habitual. E insiste: «se está elevando su temperatura hasta una cifra récord». Que sepamos, no hay estadísticas de medición de temperaturas en el Mar Mediterráneo. Pero si lo dice un Doctor en Ciencias …
Una vez que el Mediterráneo ha creado la peligrosa masa de nubes, entonces intervienen los perversos «vientos locales», que la mantuvieron fija, anclada, al Sur de Valencia capital. La capital valenciana estaba bien preparada para aguantar lluvias torrenciales. Pero la parte al Sur de la capital estaba contruida sobre terrenos inundables. Y allá precisamente la anclaron los «vientos locales». Una casualidad más. Desastre natural, evidentemente.
La ventaja de seguir a los entendidos es que poseen datos que no llegan al ciudadano medio. Como el que sigue: «el total diario (en) la Estación Meteorológica de Turís Mas de Calabarra ha arrojado 771,8 litros. (Más datos de esta Estación en https://castellondiario.com/datos-historicos-en-la-estacion-meteorologica-de-turis-mas-de-calabarra-durante-la-dana/#google_vignette).
Y trasladando la experiencia valenciana a Navarra, termina el artículo con una puntualización: En una provincia más al Norte, como Navarra, no influye el Mediterránoe. Aquí el peligro son lluvias torrenciales durante varios días seguidos. Eso produce inundaciones. Pues el experto lanza una premonición: «Esos episodios torrenciales se han dado y se darán. Es un fenómeno global”. De forma que nadie está libre de sufrir inundaciones y de que le suba el agua medio metro en la cocina, si vive en una planta baja.
Aquí no queremos entrar en qué hicieron las Autoridades, de este o este otro color, bien o mal. Actúen los damnificados. Nadie puede suplirles. Lo preocupante, además de lo recientemente sufrido, es que el fenómeno se normalice, se periodifique, lo conviertan en algo endémico. Algo que vuelva a ocurrir una y otra vez. Como en Florida. Eso, pensamos, es lo que hay que impedir.
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