Imágenes fascinantes de las cataratas del Niágara medio congeladas luego de la tormenta invernal.

Por RT

            Las temperaturas gélidas congelan la niebla y el rocío de las cataratas formando una capa de hielo superficial en el agua.

            La tormenta invernal que azotó varias zonas de EE.UU. generó la congelación parcial de las cataratas del Niágara y sus alrededores.

            El espectacular ‘paraíso invernal’ que ha sido compartido por los usuarios de las redes sociales es el resultado de las temperaturas gélidas, que congelan la niebla y el rocío de las cataratas, formando una capa de hielo superficial en el agua.

 

            Progresivamente, estas capas de hielo se acumulan en la base de los saltos, dando lugar al fenómeno conocido como «puente de hielo». La acumulación de hielo puede superar los 12 metros de espesor.

 

            En la década de 1,¡.880, la gente caminaba sobre el puente de hielo, que era una atracción turística. No obstante, en 1912, un accidente, en el que murieron tres personas, obligó a las autoridades a restringir el acceso al público.

            El volumen de agua que fluye por debajo de las capas de hielo, así como el movimiento continuo del río Niágara, impiden que las cataratas se congelen totalmente. Sin embargo, el lado estadounidense estuvo a punto de congelarse en al menos cinco ocasiones, porque hielo flotante bloqueó la corriente de agua río arriba, reduciendo su caudal.

 

            A partir de 1.964, se decidió colocar una barrera de hielo para controlar el daño potencial que podría causar su acumulación. La valla de 2,7 kilómetros de largo está constituida con pontones flotantes de acero colocados entre la ciudad canadiense de Fort Erie y la estadounidense de Búfalo.

            De acuerdo con información del Parque Estatal de las Cataratas del Niágara, cada segundo fluyen por ellas alrededor de 3.160 toneladas de agua a una velocidad de caída de 9,7 metros por segundo.

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Comentario de esta Casa.

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            Reconocemos que nos equivocamos en nuestras sospechas. El gran invierno frío que nos azota, o lo hará en breve, no es producido por el hombre, con sus antenas malvadas. Sino producido por una enorme erupción volcánica. Que se dio en las profundidades del Oceáno. Y eso, como en 1.815, ha alterado el clima de los meses siguientes. Esto, señores Globalistas, es la fuerza de la Naturaleza. Y pretender que el pigmeo humano es capaz de retrasar, anular o revertir la obra de la Naturaleza es, no ya supuesta arrogancia, sino discurso vano para oculta criminales propósitos.

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            Es de especial interés el útimo vídeo, el titulado «Lo que te están ocultando». Lo ocultan porque la realidad contradice sus espurias y fantasiosas justificaciones del mal llamado «calentamiento global!, que ahora se ha transformado en el más ambiguo «cambio climático». Así vale en las dos direcciones. Si se calienta, debido a las respiraciones de los humanos y a las flatulencias del ganado. Si el clima se enfría … ya veremos con qué salen. Retorciendo la Ciencia y todo lo que haga falta.

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            Se imaginan que están con sus 500 millones de Siervos en toda la Tierra, que no pueden hacer nada, que están confinados. Y que no pueden sino obedecer a aquellos de los que depende su subsistencia. Penosa, pero subsistencia. Por eso la «renta básica universal» es fundamental. Porque prepara el terreno para cuando, efectivamente, sólo haya 500 millones de Siervos. 

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            El problema que tienen es cómo pasar de 8.000 millones de habitantes a 500 millones. Máxime, si los BRICS no parece que vayan a estar por la labor de despoblación acelerada. En 8 años. Esto significa que tendrían qus «eliminar«, para no emplear vocablos más tétricos, a unos 940 millones de humanos cada año. Y eso sería del orden de 9 veces más de los que los que mueren cada año normalmente. Y no creemos que la Humanidad vaya a aguantar estoicamente, como si no pasara nada, que se den aumentos de la tasa de mortalidad del 900 %.

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            Además está con qué arma lograrían ese récord. Los políticos cómplices son tan cortos de inteligencia como sus Jefes. Vuelven con el «cuento chino» del Covid, y nunca mejor dicho. Y hasta lo dicen con cara seria, como si creyeran en ello. Cierto que podrían lograr que esta vez las Farmacéuticas pusieran más dosis letales en los viales. No las pocas que pusieron la primera vez. Pero contamos conque la gente haya espabilado y no se vayan a inocular el 80%, sino escasamente el 8 %. Con lo que el efecto sobre la población sería sólo un poco más dañino que el año pasado. Tampoco realizaría los planes de los criminales. Están metidos en un callejón sin salida. 

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            Ellos contaban que a la primera, tomada la población por sorpresa, lograrian eliminar a casi todos, menos los 500 que ellos necesitan en sus vanos sueños. Pero no les resultó. Afortunadamente, existen más humanos pensantes que los que ellos se habían imaginado. Y uno recuerda la frase de uno de los Portavoces. Todavía pretendía predicar sobre lo que debíamos hacer los demás. «Ellos creen que tienen elección, pero no tienen elección. La Normalidad no volverá hasta que hayamos vacunado a toda la población del planeta.»(Bill Gates)

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            Es curioso que habla de «ellos», hasta que (nosotros) hayamos vscunado». Acostumbrado a hacer trampas y que le salgan bien … Habituado a mandar y que todos le obedezcan. Pero esta vez se metió en un asnto que le venía grande. Perderá todo lo logrado anteriormente. Y aquí no lo lamentaremos.

    

            Creyeron que poniéndonos delante la zanahoria de la Normalidad caeríamos todos en la trampa. Y accederíamos a pincharnos con nadie sabe qué. Demasiado éxito tuvieron. Lo que demuestra que vivir con todo resuelto, sin problemas de supervivencia, no le sienta bien a la raza humana. Parece que son necesarios sustos, peligros, amenazas de vida o muerte. Nuestros padres pasaron la Guerra civil española o la II Guerra Mundial. Nuestros abuelos, la I Guerra Mundial. La generación de los baby boom éramos la primera generación que no había tenido que librar una guerra en su vida. Estabamos equivocados. Sólo que hoy en día las guerras son distintas. Son guerra on line.

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No fue el HAARP sino un volcán el causante del frío  No fue el HAARP sino un volcán el causante del frío

 

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