Nos fumigan para eliminarnos a futuro
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Comentario de esta Casa.
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Es un hecho inadmisible que los Gobiernos estén aceptando que Empresas desconocidas, extranjeras, nos echen encima substancias que son perjudiciales para nuestro organismo. Que son perjuidiciales ya se sabe, porque se han hecho análisis de lo que cae del cierlo. Porque lo que sueltan acaba en la tierra. Que aquí estamos nosotros. Y hay gente que se dedica a analizar el suelo. Y encuentran Aluminio y metales raros en proporciones que no son lo normal en una tierra de sembrado.
Esto sería inaceptable con unos políticos normales. Corruptos, pero no traidores. Pero si se suman ambas condiciones a escala mundial, entonces el mundo se convierte en distópico. Y ante una población sorprendida, atónita e indecisa, los marrulleros siguen haciendo de las suyas. Hasta que se le inchen las narices al personal. Entonces vendrán «las madres mías». Pero ya será tarde.
Pretenden engañarnos de nuevo con inyecciones letales en un porcantaje de viales que no depende de nosotros. Pretenden encerrarnos de nuevo, con motivo de «la nueva farsa pandémica». O con «la farsa climática inexistente». Y de paso que lo intentan, van a ver cómo de sumisos somos. Si lo somos mucho, seguirán aún más. Si les cortamos masivamente, verán que no pueden con nosotros.
De forma que la respuesta a todas esas marrullerías de seres despreciables será la solución, o la perdición. Tú decides, Lector.
PD: Explicación del título: Las fumigaciones, o «Chemtrails», es un arma de escaso efecto a corto plazo. A largo plazo aún no sabemos qué efecto tiene. Lo sabremos, si les dejamos seguir. Pero por algo los hacen. Es fácil que cuando lo averigüemos tal vez estemos demasiado débiles para rebelarnos. Entonces habrían triunfado.
Nos fumigan para eliminarnos a futuro